
Para poder atender a estas nuevas necesidades se necesitarían más Educadoras Sociales, con mayor dedicación, nuevas aulas y más adecuadas a las necesidades del programa y finalmente mayor aportación del presupuesto municipal.
He tenido breves conversaciones sobre estas necesidades con miembros del equipo de gobierno actual, y la respuesta que he recibido me ha parecido que no era del todo positiva. Creo, y creemos en nuestro grupo Por Muskiz, Bai, que todo lo que hagamos para lograr que estas niñas y niños se encaucen por un camino correcto tiene un valor incalculable, ya que los beneficios se extenderían durante toda la vida de cada uno de ellos y de ellas.
Si lo más importante son las personas, los niños y niñas son los primeros por ser los más débiles, y si es preciso se debería recortar del “hormigón y el ladrillo” para que nadie de los que lo precisen se queden fuera del programa Ikasgune por falta de medios y recursos municipales.
Javi García.- Concejal