sábado, 25 de abril de 2015

Escuela de Ciudadanía. Dept. Urbanismo y Dept. Cultura

Uno de nuestros fundamentos es la participación ciudadana. Ya hemos defendido en anteriores artículos la importancia que tiene el acceso a la información para que los y las vecinas puedan tomar parte activa en la gestión municipal. El conocimiento del funcionamiento del Ayuntamiento es básico para poder reflexionar y opinar sobre los aspectos que nos influyen en nuestra vida cotidiana. 

Durante los próximos posts hablaremos del Ayuntamiento, cómo funciona, cuáles son sus departamentos, el presupuesto actual para cada uno de ellos, los servicios que prestan y cuáles son, en nuestra opinión, las necesidades de mejora. 

Hay cuatro grandes departamentos: 1)Urbanismo, Obras y Servicios, 2)Cultura y Deportes, 3)Acción Social y 4) Medio Ambiente. Además, consideramos importantes los siguientes aspectos: la plantilla municipal, la contratación de obras y servicios y el presupuesto anual.

Hoy empezaremos con los departamentos de Urbanismo y Cultura.

Departamento de Urbanismo

Este departamento es el responsable de todo el urbanismo, de las obras, licencias, de los servicios de aguas, recogida de basuras, limpieza de calles, jardines, caminos, ríos, alumbrado, semáforos, cementerios, brigada de obras, etc..






Departamento de Cultura y Deportes

Está dividido en subáreas: cultura, deportes, euskera y juventud. Se encarga de la elaboración de programas y actividades para potenciar el euskera, musicales, festivas, deportivas, teatrales, artísticas, formativas, etc. durante todo el año. Como ejemplo podemos destacar las siguientes: Temporada de Teatro, Fiestas patronales, Feria agrícola, Programa de cursillos deportivos, Ciclo Coral Internacional…

Asimismo se gestiona la actividad generada en varios equipamientos municipales (tanto actividades como contratación de empresas de servicios para esos equipamientos), siendo los más importantes el Meatzari Aretoa (sala de cine y teatro), la Casa de Cultura, el Gaztegune y el Polideportivo municipal, junto a los frontones y los campos de fútbol.


Este departamento apoya a las personas y/o entidades vinculadas con el mundo del deporte, la cultura y la educación, mediante dos sistemas: a) cesión del uso de locales y espacios municipales para el desarrollo de sus actividades y b) puesta en funcionamiento de líneas de subvención (clubes deportivos, asociaciones culturales, comisiones de fiestas, asociaciones de madres y padres...).




miércoles, 15 de abril de 2015

La refinería. 3ª parte.Control datos de cabinas. Picos de tóxicos.

Las tres cabinas de las que hablábamos en el blog anterior están conectadas a la RED DE VIGILANCIA DE LA CALIDAD DEL AIRE DE LA COMUNIDAD AUTÓNOMA VASCA.
    - La cabina situada en la estación del tren en Muskiz, gestionada por el Departamento de Medio Ambiente y que a día de hoy sigue sin realizar todos los controles establecidos en dicha Autorización  ya que no mide ni CO (Monóxido de Carbono) ni PM2,5 (partículas de 2,5 micras).
 - La cabina situada en San Julián, gestionada por la refinería. Sólo personal de la refinería o contratado por la misma tiene acceso al interior de la cabina.
 - La cabina de Abanto, situada junto al Ayuntamiento de Gallarta, gestionada por el Departamento de Medio ambiente.
  1.  

A lo largo de los años desde su instalación, ha habido muchas incidencias en la refinería que han ocasionado el vertido de gases y humos a la atmósfera cargados de sustancias tóxicas para el medio ambiente y la salud. En muchas ocasiones, los datos de las cabinas han dejado de ser publicados en los días de los incidentes y en otras, a pesar de que ha habido picos de productos calificados como carcinógenos, no se ha considerado importante.

Pondremos un ejemplo reciente de estas dos últimas semanas. Desde hace tiempo, antes de la parada plurianual de Petronor, padecemos episodios de olores y problemas de diferente sintomatología vinculados a los picos de BTX (benceno, tolueno y xileno) que registra la cabina de San Julián. Petronor inició la parada a mediados de enero y finalizó en marzo, comenzando el arranque de unidades a partir del 23 de dicho mes. Era de esperar que los problemas de los picos sufridos desapareciera después de las mejoras anunciadas por la empresa a través de los medios de comunicación hablados y escritos, pero no ha sido así. Todo ha empeorado y sufrimos picos más frecuentes y más altos llegando un día a 151 de tolueno, casi 100 de xileno y 32 de benceno, todo ello a la vez.

Lo más incomprensible e inaceptable es que hemos avisado de estos picos al Ayuntamiento de Muskiz, y él a Medio Ambiente de Gobierno Vasco desde el ocho de abril, aportando los datos de cabinas para que se actúe en consecuencia. El Técnico Asesor de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Muskiz nos dice que él no puede hacer más que mandar nuestros correos  al Gobierno Vasco. La información que sobre competencias municipales figura en la web de Medio ambiente de GV dice que el ayuntamiento tiene más obligaciones de las que reconocen los técnicos municipales. Pueden participar en la gestión de salud pública aunque a nivel primario y en los casos en los que se den posibles incumplimientos de las industrias a las que conceden licencias.

Desde el ocho de abril en que comenzaron los picos,  la situación ha ido a peor alarmantemente. Independientemente de que se apliquen los criterios de límites a exposiciones agudas y se superen o no, sabemos que esos criterios, como en el caso del benceno, no contemplan la exposición simultánea a varios COVs sino que consideran exposiciones a ese contaminante concreto.
Según la ATSDR,  ninguno de los tres COVs con picos alarmantes es inócuo. El benceno es carcinógeno y el xileno y tolueno son patógenos, generadores de patologías diferentes de cáncer pero patologías al fin y al cabo. Igual no nos morimos de cáncer pero podemos hacerlo de una insuficiencia respiratoria o cualquier alteración más.

El día 8 se mandó al Ayto de Muskiz la tabla de registros de la cabina de San Julián con picos que llegaban a 64,07 en tolueno; 44,05 en xileno y 20,38 en benceno con varias horas de picos en todos ellos. Los días siguientes se registraron picos pero más bajos.
El día 12 el tolueno registró valores de 71,35 y 111,71; el xileno llegó a 69,35 y el benceno a 19,03 con varias horas de picos en todos ellos también. Se mandó mail al Ayto el domingo para que el lunes lo viesen nada más llegar al trabajo.
El día 13, pese a que el Ayto y el Dep. de Medio Ambiente estaban informados desde primera hora, se produjeron los siguientes registros: 151,33 de tolueno; 92,49 de xileno y 35,82 de benceno.

Es decir, la situación ha empeorado, pese a estar informados los órganos con competencia en el control de Petronor.

Es evidente que algo no va bien en la refinería y que la población está siendo afectada sin que se determine por donde salen esos gases y por qué. Según el Ayto, ellos no tienen información de Petronor de estar sufriendo ninguna anomalía. Puesto que el problema lleva días, este hecho, si se confirmara una incidencia, sería en sí mismo suficiente para abrir un expediente sancionador.

Consideramos fundamental lo siguiente:

  • Determinar origen y causa de las emisiones.
  • Adoptar las medidas correctoras necesarias para que la población dejemos de sufrir los episodios de los que estamos siendo víctimas estos días.
  • Valorar la posible acción o consecuencias de estas exposiciones analizando los datos sanitarios: incidencia en ambulatorios, afecciones que hayan sufrido un incremento etc
  • Determinar si la empresa  pudo incurrir en incumplimiento de la AAI.


Los valores reflejados en las tablas de los registros son valores medios, lo que quiere decir que los picos son mayores en realidad. Además, nadie puede garantizar que en otro punto de San Julián, por las condiciones que fueran, no se produzcan concentraciones mayores, lo que quiere decir que pueden existir momentos y lugares donde las personas estén expuestas a niveles mayores que los reflejados en las cabinas.

Los datos de las cabinas son indicativos, en este caso, de que existe un problema importante pero no reflejan, por lo mencionado anteriormente, la magnitud real del problema,  puesto que en sí puede ser mayor de lo que indican las cabinas.

Estos datos no corresponden a emisiones difusas y van a peor cada día.






sábado, 11 de abril de 2015

Nuestra vecina la refinería 2ª parte. Calidad del aire y cabinas.

El seguimiento del impacto de la actividad de Petronor en el entorno se basa en los datos recogidos por las cabinas. Cada 3 meses la empresa debería presentar un informe que, partiendo de las actividades que desarrolla Petronor y contrastando las mismas con los datos de las cabinas, permitiera establecer una posible relación de causa-efecto. A día de hoy, pese a haberlo solicitado varias veces, directamente a la Viceconsejería de MA y a través del Ayto, nunca nos lo han facilitado.

Es importante este estudio porque podría identificar las fuentes o actividades con mayor impacto en el entorno, actuar preventivamente y mitigar el efecto sobre la población.

Hay 3 cabinas vinculadas a la actividad de Petronor, las dos de Muskiz y la de Abanto.

Las cabinas no realizan los controles adecuadamente. A día de hoy, la cabina de Muskiz no cuenta con todos los medidores establecidos en la AAI ya que no mide PM2,5 ni CO. Los fallos en los controles son habituales. Los controles son insuficientes ya que no controlan más que una pequeña parte de lo que emite Petronor. Como ejemplo, de los Compuestos Orgánicos Volátiles (COVs) el estudio de la UPV mide 36 diferentes y de esos, las cabinas sólo miden 3 (benceno, tolueno y xileno) y no todas las cabinas, sólo la de San Julián y Abanto porque la de Muskiz no mide BTX. Otro ejemplo sería el SH2, sólo lo miden las dos de Muskiz ya que la de Abanto no dispone de ese medidor.

Existen metales pesados catalogados como carcinógenos, como es el caso del cromo, arsénico, cadmio que van en las partículas, es decir, que si las partículas están presentes en nuestro ambiente de forma constante estos metales también y sin embargo no se miden en ninguna cabina. El control al que están sometidos depende enteramente de Petronor ya que la empresa, cada dos años, realiza controles puntuales cuyo resultado remite a la Viceconsejería de MA y ésta se limita a dar el visto bueno a lo presentado por Petronor.

Todos los controles a los que debe estar sometida Petronor dependen directa o indirectamente de la empresa. Los controles en continuo los realiza la propia empresa y los controles periódicos los realizan empresas de control ambiental, OCAs, que la empresa contrata y paga. Los controles que debe realizar se refieren a temas de emisiones, inmisiones, suelo, vertido a aguas subterráneas, río o mar, ruido y gestión de residuos.

La empresa debe remitir anualmente a la Viceconsejería de MA la información relativa a esos controles antes de abril del año siguiente. Todos esos controles componen lo que se denomina Programa de Vigilancia Ambiental (PVA) cuyos resultados deben ser públicos tal y como indica el Ararteko pero que, a día de hoy, nadie nos los ha facilitado.

Hay evidencia científica más que suficiente para decir, sin ninguna duda, que junto a una refinería el aire no puede ser “ bueno”, como se ha publicado desde las diferentes administraciones públicas. Otra cuestión es el grado de control de las emisiones y los límites establecidos, que generalmente se colocan en común acuerdo con las propias empresas contaminantes, según lo que ellas pueden aceptar , según lo que llaman “ las mejores técnicas disponibles o MTD”… Pero sabemos que en el caso de las petroquímicas los límites no se han actualizado desde el 2006 porque no les interesa ya que implicaría tener que mejorar sensiblemente sus instalaciones y aumentar  los costes de producción y disminuir los márgenes de beneficio.



sábado, 4 de abril de 2015

Nuestra vecina la refinería. 1ª parte.

Por suerte según unos, por desgracia según otros, convivimos con una refinería a la puerta de nuestras casas. Cada vez son más las noticias sobre su actividad que aparecen en los medios de comunicación, generalmente hablando de aspectos positivos entorno al cuidado medioambiental, empleo, contribución a las arcas públicas etc, dentro de una campaña de marketing para contrarrestar lo que en realidad supone de negativo una refinería y todos sabemos: contamina, degrada el aire que respiramos y por lo tanto nuestra salud y hace que la imagen de Muskiz esté únicamente relacionada con estos aspectos, minimizando las posibilidades de desarrollo de otros puntos fuertes de nuestro pueblo. 

Uno de los pilares de nuestra agrupación es la defensa y protección del medio ambiente y la salud pública de Muskiz. Somos un grupo plural pero en este tema estamos de acuerdo en los siguientes puntos:
1.  El hecho de ser generadora de riqueza económica no da derecho a destruir nuestro medioambiente y nuestra salud.
2.  Tiene que cumplir la ley y las condiciones impuestas por el Gobierno Vasco en la AAI (Autorización Ambiental Integrada).
3.   Las administraciones públicas tienen que velar por los derechos de la ciudadanía y protegerla de los daños ocasionados por la actividad de Petronor y no al contrario. Las leyes son permisivas.
4.   Estamos en contra de que nuestro pueblo y los colindantes reciban el visto bueno y a veces incluso las inversiones de las instituciones públicas solo para proyectos perjudiciales para nuestro medioambiente y salud: gaseoducto, torres de alta tensión, proyecto URF con planta de coke…
5.   Estamos en la era post-petróleo, en una fase de incertidumbre en cuanto a la vida útil de las refinerías. Desde el equipo de gobierno del Ayuntamiento hay que diversificar los esfuerzos y desarrollar políticas económicas sostenibles encaminadas a fomentar industrias que generen riqueza económica, protejan nuestro medioambiente y salud y no pongan en riesgo la subsistencia y supervivencia de las futuras generaciones.
6.   A la vista de las cifras de paro de Muskiz de los últimos años, es obvio que la repercusión económica positiva de Petronor en el pueblo en lo que a creación de puestos de trabajo locales se refiere es insuficiente, escasa.

Nuestra actividad en los cuatro años de legislatura en lo que a la refinería se refiere ha sido intensa. Gracias al trabajo realizado por nuestra compañera Meli, del barrio de San Julián, y a otros miembros del grupo que participan en asociaciones medioambientales hemos recopilado información (a pesar de los obstáculos encontrados tanto por parte de administraciones públicas como de la empresa) y trabajado para que se cumpla la legalidad y las obligaciones impuestas a Petronor en la AAI. Hemos llevado información sobre niveles de emisión de contaminantes, denuncias sobre incidentes que han perjudicado la salud de la ciudadanía etc ante el Ayuntamiento, Gobierno Vasco, Ararteko, Parlamento Europeo.
En este tiempo, hemos constatado algo que ya sabíamos: nosotros estamos solos, Petronor no. ¿Por qué? Porque desde las administraciones públicas se impide el acceso a la información, se ocultan datos imprescindibles para que la ciudadanía ejerza sus derechos, se legisla pensando en el beneficio económico de la empresa, con amplios márgenes de niveles de contaminación, se pasan por alto muchas irregularidades y un largo etcétera.